Ibiza es uno de los destinos turísticos más demandados en el Mediterráneo | Nicolás V. (CC by 2.0, Flickr)
Ibiza es una de las islas mediterráneas más conocidas por ser un destino de fiestas y lujos, pero visitarla con niños puede aportaros a toda la familia una gran variedad de experiencias. Pese a su fama, la isla de Ibiza ofrece una multitud de planes con niños. Por ello, se va a dedicar este post a explicar algunos de ellos.
1. Visitar sus playas
Ibiza se caracteriza por tener unas playas y unas calas preciosas que, además, son ideales para ir con niños.
Entre ellas, está la Cala Llenya, situada en el municipio de Sant Joan, al norte de la isla. Tiene 190 metros de playa y está en una zona muy tranquila con parte de arena blanca y aguas cristalina. Con un pequeño chiringuito y rodeada por un acantilado, es el lugar ideal para pasar en familia.
2. Conocer el casco antiguo
El casco antiguo de Ibiza, conocido también como Dalt Vila, se encuentra en la parte más alta de la ciudad. Cuenta con unas calles de los más pintorescas y son muchas las visitas guiadas gratuitas para conocerlo.
En estas visitas, te explican la historia de sus calles y multitud de datos curiosos. ¡Los niños se quedan encantados!
Los lugares que formar parte del casco antiguo de la ciudad son las murallas, que datan del siglo XVI, la Catedral de la Virgen de las Nieves, el Ayuntamiento y la Plaza de la Vila.
3. Hacer actividades en la naturaleza
Uno de los atractivos de Ibiza está también en el turismo acuático y deportivo. Para los niños es toda una experiencia hacer todas las actividades que ofrece la isla.
Por un lado, hacer snorkel en S’Illot des Renclí. Desde allí, hay excursiones (por agua) para ver la Posidonia, que es una planta marina que da el color turquesa al agua de su playa. Esta planta ha sido declarada patrimonio de la humanidad por la Unesco.
Por otro lado, practicar kayak y paddel surf en la playa de Talamanca. Es una de las playas más familiares y, desde su pequeña bahía, se pueden realizar estas actividades con monitores para los más pequeños.
Y, por último, visitar el parque de arbolismo de Ibiza: Acrobosc. Con 400 metros de tirolinas y puentes tibetanos, los niños disfrutarán de un día lleno de aventuras.
4. Recorrer la Cova de Can Marçà
La Cova de Can Marçà está localizada en el Port de San Miquel en un entorno natural con vistas a las islas Ferradura y Murada.
Es uno de los atractivos principales de la isla ya que la cueva esconde un misterio. Los niños se quedan asombrados con este lugar lleno de formaciones de la naturaleza, como son los lagos.
5. Hacer una ruta por el Parque Natural de Ses Salines
El Parque Natural de Ses Salines es una joya natural de Ibiza gracias al avistamientos de flamencos que se puede hacer en temporadas concretas del año.
No es muy conocido por los turistas por lo que es ideal para hacer una ruta en familia y disfrutar de la naturaleza.
Visto en Blau Parc Hotels
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